Deambulatorio

(lat. Ambulatorium). El deambulatorio, en el sentido actual cultual del término, se asocia con el ambulacro que rodeaba al altar por su parte posterior en la arquitectura Románica, dando lugar posteriormente a la girola a partir del Gótico.

Sin embargo, estos ambulacros tienen su origen en la arquitectura paleocristiana, con la monumentalización del culto a los mártires mediante la erección de grandes basílicas sobre sus lugares de sepelio, que solía coincidir además, frecuentemente, con el de su propio martirio. Estos grandes edificios, que solían adoptar el esquema basilical de tres o más naves, disponían, generalmente, de una cabecera compleja, que se articulaba en torno al sepulcro del mártir, alrededor del cual se disponían estructuras arquitectónicas que permitían la circulación de los fieles para una mejor contemplación del monumento funerario martirial o "memoriam", donde se encontraba depositado el Cuerpo Santo.

Para no interrumpir las funciones del culto ordinario, estos deambulatorios, frecuentemente, quedaron bajo el pleno del presbiterio de las basílicas, que vio sobreelevada así toda su estructura, o bien solamente el espacio cultual inmediato al altar, a fin de dejar despejado el espacio destinado a la circulación del clero celebrante.

De este modo, el deambulatorio se constituye en elemento fundamental de articulación de las primitivas criptas martiriales, disponiéndose en sus muros las "fenestrellas", ventanitas que permitían la contemplación por los fieles del sepulcro martirial situado en la cámara central.

En el Reino de Asturias consta, de momento, la existencia probable de una cripta, de tipología paleocristiana bastante arcaica, bajo el actual templo de San Pelayo en el monasterio homónimo, que se correspondería con la primitiva basílica de San Juan Bautista, que consta que antecedió a la actual iglesia en este lugar.

Cripta con deambulatorio semicircular, en la basílica vaticana, bajo el altar de San Pedro, tras la reforma del Papa San Gregorio Magno (s. VII). Cripta con deambulatorio semicircular, en la basílica vaticana, bajo el altar de San Pedro, tras la reforma del Papa San Gregorio Magno (s. VII). Cripta con deambulatorio poligonal en torno a camarín central, en la iglesia anglosajona de Todos los Santos, en Wing (s. VII, Wessex, Inglaterra). Cripta con deambulatorio poligonal en torno a camarín central, en la iglesia anglosajona de Todos los Santos, en Wing (s. VII, Wessex, Inglaterra). Cripta con deambulatorios laterales rectos en torno a camarín central en la iglesia anglosajona de San Andrés de Hexham (s. VII, Northumberland, Inglaterra). Cripta con deambulatorios laterales rectos en torno a camarín central en la iglesia anglosajona de San Andrés de Hexham (s. VII, Northumberland, Inglaterra). interpretación de la cripta con deambulatorios laterales rectos en torno a camarín central, en la probable cripta de San Juan Bautista de Oviedo (Alfonso II, 791-842). interpretación de la cripta con deambulatorios laterales rectos en torno a camarín central, en la probable cripta de San Juan Bautista de Oviedo (Alfonso II, 791-842).

Dintel

El dintel es un elemento sustentante, conformado por un único bloque, o varias dovelas (talladas en cuña), de piedra o ladrillo, dispuesto horizontalmente, sobre un vano, coronando el mismo, y recibiendo el muro. El remate de los edificios a base de piezas rectilíneas (arquitectura arquitrabada), es el más primitivo que existe, y es eficaz mientras sobre los arquitrabes no se sitúen muros altos y pesados, que producirían fuertes presiones sobre la pieza, limitando la amplitud de los vanos por riesgo de rotura. Para evitar este problema, en la arquitectura asturiana se recurrió a arcos de descarga, dispuestos sobre los dinteles de puertas y ventanas.

Acción conjunta del dintel y del arco de descarga, desviando los empujes hacia los laterales del vano. Explicación gráfica.

Dovela

(Fr. douvelle) La dovela es cada una de las piezas de piedra tallada en forma de cuña que, aparejadas conjuntamente de forma yuxtapuesta conforman un arco o una bóveda. La dovela, como bloque prismático cúbico tiene seis caras: dos verticales, o cabezas; dos laterales, o lechos; la superior, que formaría el plano superior del arco, se denomina extradós, y la inferior, visible al pasar bajo el arco, intradós.

Las dovelas de un arco han de ser siempre en número impar de piezas. A la pieza central se la denomina clave, y contraclaves a las situadas inmediatas a ambos lados de la misma; a las dos primeras piezas del arco, situadas inmediatamente sobre las jambas laterales del vano, o capitel o cimacio del pilar o columna, se las denomina salmeres.

Arco de medio punto con despiece de dovelas calizas en el edículo de la fuente de Foncalada. Arco de medio punto con despiece de dovelas calizas en el edículo de la fuente de Foncalada. Arco de medio punto con despiece de dovelas en la fachada norte de la torre defensiva de Alfonso III. Arco de medio punto con despiece de dovelas en la fachada norte de la torre defensiva de Alfonso III. Arquería de medio punto en Santa María de Naranco, con dovelas de gran cuerda, cabezas con talla de molduras y salmeres compartidos en las columnas exentas. Arquería de medio punto en Santa María de Naranco, con dovelas de gran cuerda, cabezas con talla de molduras y salmeres compartidos en las columnas exentas.